Después de andar en la nebulosa por "obvias" razones, vuelvo a escribir sobre la vida cotidiana. El trabajo, los jefes, la gente que dice por ahí que soy juiciosa, que soy buena, que soy pila, que aprendo rápido. El buen ambiente de algunos días en la oficina. Mis nuevos "compinches" del DNP, Gabriel a la hora del almuerzo, que no salgo, que si salgo que a la una que a las dos que a las tres...
Casi no tenemos tiempo de vernos y el momento del almuerzo es casi sagrado para nuestra relación. Hay muchas cosas que pensar y otras tantas que decidir en conjunto, como "familia" que somos. Que cómo, qué cuándo, qué dónde... Qué necesitamos y todas las demás cosas.
Lo difícil no es tomar la decisión, es tener a todos contentos, sin faltar a mis principios. Lo dije mil veces después del matrimonio de mi hermana que por cierto fue bastante estresante. No vestido, no iglesia, no recepción.
Si podemos encontrar la manera de celebrar con los que son en un ambiente informal que no requiera el mayor gasto de dinero, sería maravilloso. Se leen sugerencias....
Suena: Caetano
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