In Memoriam

Tengo el deber de publicar un post con referencia a aquellos hombrecillos (desde mi apartamento se ven dimutos) que garantizan la eficiencia de la infraestructura que se construye por estos días, para el adecuado funcionamiento del Sistema de Transporte Masivo Urbano de Bogotá, Transmilenio.

Ayer en las horas de la tarde fuimos sorprendidos por un cierre inesperado de la carrera 30 en ambos sentidos. El trancón alcanzaba dimensiones impresionantes para ser un domingo de lluvia en la tarde. Se veían los movimientos de grúas, criminalística, policía, ambulancias, y todos esos carros que juntos me producen un flash temporal de la época de Don Pablo. Esos tiempos en los que cada rato explotaba una bomba de mediano o alto poder, o en los que nos desalojaban por amenaza.

No, ese no era el caso. Más tarde llegó la noticia. Tres obreros contratistas de CODENSA murieron cuando pretendían trasladar un poste de alta tensión, frente al caño de la Universidad. Al cuarto obrero le tuvieron que amputar una pierna. Dolorosa historia para la construcción de una Fase II, del TM. Lo peor era la angustia de la gente que vió el suceso. Lo peligroso, la tensión que la caída del poste produjo en los restantes de la zona.

Curioso, uno casi nunca se detiene a descubrir debajo de los cascos y la tierra de su trabajo, los ojos de los seres humanos que se sacrifican cada día por garantizar que algunos de nosotros tengamos un mejor nivel de vida. ¿ y quién responde por sus familias?

Triste, el tiempo lo reseña en una página no importante, claro en este país del Sagrado Corazón, tres muertos no violentos solo engrosan el montón, pero eso sí, Catalina y su madre (parece ser que es decana de Veterinaria) en primera plana luciendo hermosos vestidos del diseñador....